La mastopexia, también conocida como cirugía de levantamiento de mamas, es un procedimiento diseñado para elevar y reafirmar las mamas caídas (ptosis mamaria). Es importante mencionar que puede realizarse con o sin implantes, dependiendo de tus objetivos y la evaluación que realicemos en la consulta. Si tienes suficiente volumen mamario pero tus senos están caídos, una mastopexia sin implantes puede ser suficiente para lograr un hermoso resultado. Por otro lado, si además de la caída del busto deseas aumentar el tamaño de tus mamas, entonces una mastopexia con implantes sería la opción recomendada. Como cirujano plástico con amplia experiencia, he visto cómo esta cirugía puede transformar no solo la apariencia física sino también la autoestima de mis pacientes.
La ptosis mamaria puede ocurrir por diversas razones, como el envejecimiento, los embarazos, la lactancia, componente genético o la pérdida significativa de peso. Durante la mastopexia, retiramos el exceso de piel y redistribuimos el tejido mamario para lograr una forma más juvenil y turgente. En algunos casos, también podemos reducir el tamaño de la areola para lograr una proporción más armoniosa.
La mama consta de tejido glandular y tejido graso. Las que poseen un mayor porcentaje de tejido glandular suelen obtener resultados más firmes y con una forma más duradera después de la mastopexia, en comparación con las mamas que tienen un predominio de tejido graso. Esto se debe a que el tejido glandular proporciona un mejor soporte estructural, mientras que el tejido graso tiende a ser más blando y puede reabsorberse con el tiempo. Para las mamas con una mayor proporción de tejido graso, se utilizan técnicas quirúrgicas especiales que me ayudan a mantener la forma y el contorno deseados. Por eso, es fundamental que realizar una evaluación exhaustiva durante la consulta para determinar el enfoque más adecuado para ti.
Uno de los aspectos más importantes de la mastopexia es el manejo de las cicatrices. Con las técnicas avanzadas que utilizamos hoy en día, podemos minimizar su apariencia. Aunque siempre quedarán algunas marcas, con los cuidados postoperatorios adecuados como el uso de INDIBA, cremas cicatrizantes, NANOPORE y protección solar, la mayoría se vuelven muy poco notorias con el tiempo.
En cuanto a las cicatrices, estas varían según la técnica utilizada y la cantidad de piel que se debe eliminar. Las técnicas más comunes incluyen:
1. Cicatriz periareolar: alrededor del borde de la areola. Esta es la menos invasiva y se usa cuando se requiere una mínima elevación que suele ser menor o igual a 3 cm.
2. Cicatriz en ancla o T invertida: combina una incisión alrededor de la areola, una vertical desde la areola hasta el pliegue del seno de aprox. 5 cm y una horizontal a lo largo del pliegue inframamario. Su longitud depende de la cantidad de tejido a resecar y a compensar. Esta técnica es utilizada en casos de ptosis (caída) severa.
3. Cicatriz en “lollipop” o vertical: incluye una incisión alrededor de la areola y otra vertical desde la areola hasta el pliegue del seno. Es adecuada para ptosis moderada.
Ten la seguridad de que utilizaré la técnica que mejor se adapte a tu caso para obtener los resultados deseados con las cicatrices más estéticas y discretas posibles.
La recuperación después de una mastopexia generalmente toma alrededor de 4-6 semanas. Durante este periodo es fundamental usar un brassier de soporte, evitar actividades deportivas o realizar esfuerzos grandes. El ejercicio ligero, como caminatas cortas, puede reanudarse a las 6 semanas y el entrenamiento de fuerza a partir de las 12 semanas. Todo esto confirmado previamente con el doctor, ya que la evolución de cada paciente es diferente y debemos confirmar que las heridas esten completamente secas y cerradas. La mayoría de mis pacientes pueden regresar al trabajo en una o dos semanas, dependiendo de la naturaleza de su ocupación.
La mastopexia es considerada una cirugía segura dentro del campo de la cirugía plástica. En comparación con otros procedimientos más invasivos, el riesgo de complicaciones es relativamente bajo. Algunas de las complicaciones potenciales incluyen infección, sangrado, cicatrización anormal, pérdida de sensibilidad en el pezón o las mamas, y asimetrías menores. Sin embargo, al ser realizada por un cirujano plástico certificado y experimentado, siguiendo las mejores prácticas y cuidados postoperatorios, estas complicaciones son poco frecuentes. Además, al tratarse de una cirugía que no implica la creación de grandes incisiones ni la manipulación de órganos internos, los efectos secundarios suelen ser más limitados y la recuperación más rápida en comparación con otros procedimientos más invasivos.
Es crucial que cada paciente siga cuidadosamente las indicaciones postoperatorias para una recuperación óptima. El resultado final exitoso, depende en un 90% del cuidado minusioso que haya tenido el paciente después de su cirugía.
Una buena comunicación y adherencia a las instrucciones, es esencial para minimizar el riesgo de complicaciones y obtener los mejores resultados posibles.
Si tus senos han perdido su forma y firmeza, una mastopexia puede ser la solución que estás buscando. En mi práctica, nada me complace más que ver a una paciente recuperar la confianza en su apariencia. Te invito a agendar una consulta para que juntos podamos debatir cómo esta cirugía puede beneficiarte. ¡No postergues más tus deseos de sentirte feliz con tu cuerpo!
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